Portugal y los ingresos: cómo aprovechar su régimen fiscal
En Librestado hemos hablado de muchos países a los que puedes emigrar para reducir o incluso eliminar el pago de impuestos. Países con tributación territorial como Panamá, los países non-dom del Reino Unido, Irlanda y Malta, o el especialmente ventajoso régimen fiscal non-dom de Chipre, son algunos ejemplos.
Pero el mundo es mucho más grande y otros países también quieren atraer emprendedores exitosos e inmigrantes cualificados o adinerados que traigan dinero y contribuyan a la Seguridad Social (que, como seguramente sabes, cada vez está más cerca de la quiebra total).
Hoy nos centramos en el interesante programa NHR (residente no habitual) para quienes residen en Portugal.
Pocos conocen en profundidad las ventajas fiscales que hacen de Portugal uno de los destinos más atractivos para colectivos que desean emigrar a un país con cultura occidental, cercano a España y con un idioma similar. Muy diferente de los típicos paraísos fiscales en pequeñas islas o países con culturas muy distintas a las occidentales.
Y a diferencia de muchas soluciones pensadas para emprendedores digitales que venden en el extranjero, la residencia en Portugal también ofrece ventajas para empresarios con negocios que requieren presencia física.
Portugal, a pesar de ser un país con alta presión fiscal, es un destino vacacional muy popular. ¿Cómo puede considerarse un paraíso fiscal? Sin duda, esto sorprenderá a más de uno, y también puede ser una ventaja, ya que Hacienda no verá con malos ojos el traslado.
Al igual que en España (con su régimen fiscal especial para trabajadores impatriados), Portugal puede ser un paraíso fiscal para extranjeros.
La ventaja principal es que ni España ni Portugal aparecen en listas negras, a pesar de permitir vivir sin pagar impuestos o pagando muy pocos en ciertos casos. Es decir, no generan sospechas en términos de optimización de ingresos y bienes.
El programa portugués existe desde 2009 y, aunque puede parecer más complejo que otros, no lo es en la práctica si se siguen ciertos pasos. La emigración a Portugal es sencilla para cualquier ciudadano de la Unión Europea. Pero empecemos por el principio.
Portugal es uno de los pocos países en los que se puede mantener la residencia fiscal sin residir físicamente allí durante al menos 6 meses.
Es decir, no necesitas residir realmente en Portugal, basta con tener una vivienda en propiedad o alquilada.
Eso sí, debes evitar pasar demasiado tiempo en otros países, ya que esto podría convertirte en residente fiscal allí.
Pero esta no es la única ventaja del programa NHR en Portugal, que está limitado a un máximo de 10 años. Aquí tienes un resumen de sus principales beneficios:
- Residencia en un país de la Unión Europea con buena reputación (sin problemas con Hacienda)
- País moderno y liberal con alta calidad de vida
- No requiere estancia mínima para mantener la residencia
- No hay requisitos mínimos en vivienda en alquiler o propiedad
- Fácil proceso de inmigración y solicitud del programa NHR
- Posibilidad de obtener la ciudadanía portuguesa tras 6 años
- Exención fiscal en dividendos, intereses, ingresos por alquiler, regalías y pensiones (si no son públicas) en ingresos del extranjero
- Exención fiscal en ciertos ingresos del extranjero por profesiones específicas
- Impuesto fijo del 20% en ingresos nacionales de profesiones estipuladas
- No hay impuestos sobre sucesiones y donaciones
Por supuesto, esto suena muy bien, pero en la práctica la situación puede complicarse. Las exenciones de impuestos dependen de cada caso particular y requieren cumplir ciertos requisitos, como dedicarse a actividades profesionales específicas.
El Gobierno ha creado un sistema complejo, siguiendo las normas de la OCDE, que requiere análisis cuidadosos y asesoramiento especializado. Además, las estrictas reglas CFC portuguesas añaden dificultad a la gestión de empresas extranjeras.
Clave: la posibilidad de imposición en otros Estados permite disfrutar de la exención fiscal en Portugal
En esencia, la exención de impuestos en Portugal se basa en la interacción del régimen NHR con los convenios de doble imposición de Portugal con otros países, o en su defecto, con el modelo estándar de la OCDE.
Estos convenios permiten gravar diferentes tipos de ingresos en el país de origen, lo que a menudo se ignora en el caso de no residentes para hacerlo más atractivo como lugar de inversión.
Con el régimen NHR, muchos ingresos que podrían gravarse en el país de origen (pero en realidad no lo son) tampoco se gravan en Portugal, lo que en la práctica puede significar que gran parte de los ingresos extranjeros estén exentos de impuestos.
Es importante revisar cada convenio de doble imposición en cada caso concreto, ya que la posibilidad de imposición en otros Estados puede variar.
Hasta ahora, Portugal ha firmado un CDI con casi 80 países. En la UE, en su mayoría siguen el modelo de la OCDE.
Por ejemplo, en el convenio entre Reino Unido y Portugal, si tienes tu residencia como NHR en Portugal y cobras dividendos en Reino Unido, según el Artículo 10 del CDI, el gobierno inglés puede gravar esos dividendos, pero en la práctica no lo hace si no eres residente allí. Por lo tanto, en Portugal no pagarás impuestos sobre dividendos ingleses como NHR, ya que Reino Unido tendría el derecho de gravarlos.
De esta forma, como residente no habitual en Portugal, puedes recibir dividendos libres de impuestos desde Reino Unido.
Sin embargo, hay una limitación importante: los ingresos extranjeros procedentes de paraísos fiscales en la lista negra de Portugal están sujetos a impuestos.
La lista negra de Portugal es amplia y cubre casi todos los paraísos fiscales del mundo. Sin embargo, algunos países con los que Portugal ha firmado convenios de doble imposición, aunque estén en la lista, permiten exenciones.
En estos casos, los siguientes países, a pesar de estar en la lista negra, permiten eximir impuestos en Portugal sobre dividendos y otros ingresos:
- Barbados
- Hong Kong
- Irlanda
- Kuwait
- Luxemburgo
- Malta
- Macao
- Panamá
- Qatar
- San Marino
- Suiza
- Singapur
- Emiratos Árabes Unidos
- Uruguay
- Chipre
Los ingresos de estos países, en general, pueden no tributar en origen y, por tanto, tampoco en Portugal.
Es fundamental revisar cada convenio de doble imposición para evitar sorpresas.
Detalle: la exención de impuestos en Portugal
Tras entender la optimización fiscal en Portugal, veamos qué tipos de ingresos en el extranjero pueden estar exentos de impuestos en general.
Los principales ingresos en el extranjero que podrían estar exentos en Portugal son:
- Dividendos, intereses e ingresos por alquiler de inmuebles
- Ventas de bienes inmuebles, barcos y aviones
- Regalías (que a menudo no se gravan en el país de origen)
- Ingresos por profesiones estipuladas (generalmente sin imposición en el país de origen)
En Portugal, también existen ventajas fiscales para el NHR en relación a ingresos nacionales, siempre que provengan de profesiones específicas.
Estos ingresos, ya sean como trabajador autónomo o empleado, se gravan a una tasa fija del 20%.
Las profesiones que pueden beneficiarse de esta tasa fija incluyen:
- Arqueólogos
- Arquitectos
- Escultores
- Biólogos
- Programadores
- Especialistas en procesamiento de datos
- Diseñadores
- Geólogos
- Ingenieros
- Consultores tecnológicos
- Expertos en informática
- Artistas en teatro, radio, ballet, televisión
- Científicos biológicos
- Médicos
- Pintores
- Músicos
- Trabajadores de medios y comunicación
- Psicólogos
- Investigadores científicos
- Altos ejecutivos (excepto directores)
- Cantantes
- Asesores fiscales
- Profesores universitarios
- Desarrolladores web y diseñadores
- Auditores fiscales
- Dentistas
Para estos profesionales, emigrar a Portugal puede ser muy conveniente, especialmente si generan ingresos en el extranjero.
Resumen del sistema tributario y Seguridad Social en Portugal
Como NHR, algunos ingresos deberán tributar como cualquier otro residente en Portugal, y no podrás evitar contribuir a la Seguridad Social.
Independientemente del tipo de impuesto (fijo del 20% o el general), si superas el salario mínimo anual de 7.070 €, deberás añadir un 3,5% adicional.
Para quienes no perciben ingresos en Portugal, las contribuciones a la Seguridad Social se calculan en base al salario mínimo, que actualmente es de 7.070 € anuales, con cotizaciones aproximadas de unos 2.300 €, de los cuales un 11% puede deducirse de impuestos.
El sistema fiscal progresivo en Portugal tiene cinco tramos y pocas deducciones. Desde el segundo tramo, se suma un 3,5% adicional:
- 0-7.000 €: 14,5%
- 0-14.000 €: 28,5% (unos 980 €)
- 20.000-40.000 €: 37,5% (unos 2.680 €)
- 40.000-80.000 €: 45% (unos 5.880 €)
- Por encima de 80.000 €: 48% (unos 8.280 €)
La carga fiscal máxima puede llegar al 56,5% de los ingresos, sin contar Seguridad Social.
Para residentes “normales”, Portugal no es un paraíso fiscal, salvo excepciones en ciertos casos específicos.
Por ejemplo, los ingresos por propiedad intelectual tienen una exención de los primeros 10.000 €, y solo se grava el 50% de las ganancias derivadas de creaciones propias.
Las ganancias de capital, en general, se gravan al 28,5%, como en la compraventa de acciones, a menos que exista una estructura empresarial compleja que permita exenciones bajo el régimen NHR.
Portugal no grava patrimonio, ni impuestos sobre sucesiones y donaciones dentro de la familia.
También existen impuestos sobre la adquisición de bienes inmuebles, pero no profundizaremos en ello aquí.
Ahora, veamos cómo evitar pagar impuestos como NHR en su totalidad.
Ingresos en el extranjero exentos de impuestos en detalle
Recordatorio:
Los ingresos en Portugal que están exentos son aquellos generados fuera del país, que podrían haberse gravado en el país de origen, pero en la práctica no se hace.
Incluyen ciertos profesiones, regalías, ingresos por propiedad intelectual, inversiones y pensiones no públicas, siempre que no provengan de paraísos fiscales en la lista negra y no exista un convenio de doble imposición que impida la exención.
Ingresos de profesiones estipuladas
Los ingresos del trabajo por cuenta propia o profesional en el extranjero, provenientes de profesiones específicas, están exentos si podrían tributar en el país de origen.
Según el modelo de la OCDE, estos ingresos solo deben gravarse en el país de origen, salvo que puedan clasificarse en otra categoría.
En la práctica, suelen estar exentos en Portugal, salvo que exista una obligación limitada de tributar en el país de origen, por ejemplo, si tienes una oficina o empresa allí.
Ingresos por inversión
Dividendos, intereses y ganancias por alquiler o venta de bienes en el extranjero, están exentos si podrían gravarse en el país de origen.