¿Por qué hacer voluntariado es la mejor opción para una mujer que viaja sola?
Cuando viajé sola por primera vez y realicé mi primer voluntariado, estaba llena de miedos, no sabía qué esperar ni cómo sería mi experiencia. Al llegar a ese primer hostal, me di cuenta rápidamente de que todos estaban dispuestos a hacerme sentir bien. Recibí cinco sonrisas en mi habitación y cinco formas diferentes de bienvenida, todos voluntarios de distintas partes del mundo.
Recuerdo que esa primera noche, sin conocer a nadie y sin tener claro cómo funcionaba todo, me invitaron a comer. Fue un momento increíble, conversamos como si nos conociéramos de toda la vida, como si ya lleváramos mucho tiempo viajando juntos. Me sentí segura y acogida.
Para no extenderme demasiado, puedo decir que esa experiencia en mi primer voluntariado fue el momento en que dejé atrás mis miedos y me abrí a una parte de mí que desconocía. Esa oportunidad, quizás, ha sido una de las mejores que se me ha presentado en la vida.
Descubrir los voluntariados fue algo muy importante para mí. En cierto modo, me hicieron sentir libre. Libre de escoger a dónde ir sin temores, libre de decidir en qué quiero aportar a la sociedad, libre de trabajar en lo que me apasiona, libre de prejuicios y tabúes.
Además, me siento tranquila porque sé que siempre encontraré personas que harán mis días cálidos y fáciles, que me acompañarán en el proceso y que me enseñarán, tanto o más, que el mismo voluntariado.
Por eso, siempre elijo viajar sola haciendo voluntariados. Es como sentirte segura, aunque no sepas qué te depara el lugar que estás a punto de visitar. Realmente, te abre muchas posibilidades: aprender, relacionarte, conocer y crecer.
Los voluntariados son ese impulso que necesitas, guapa, para emprender ese viaje que tanto deseas pero que todavía no te atreves a hacer por miedo a viajar ligera y sin compañía.
¿Qué tipo de voluntariado puede hacer una mujer que viaja sola?
Aunque parezca obvio, sé que muchas mujeres se hacen esta pregunta antes de dar el primer paso. No te preocupes, es completamente normal. Lo primero que debes hacer es saber qué tipo de voluntariado te gustaría realizar. Elige según tus gustos, el lugar que visitarás, el aprendizaje que deseas obtener, etc.
Al llegar al destino donde realizarás tu voluntariado, lo más probable es que encuentres a otros viajeros haciendo lo mismo que tú.
Para mí, la mejor opción son los hostales. No solo porque suelen haber varios, sino también porque reciben a viajeros de todo el mundo con quienes podrás conversar, salir a explorar y, en ocasiones, hacer viajes juntos.
También existen voluntariados en escuelas o fundaciones, que te permiten estar en contacto con otras personas, no solo viajeros sino también profesores y locales, quienes te mostrarán y enseñarán su cultura y costumbres.
Los proyectos orgánicos, como trabajar en granjas ecológicas o en permacultura, no solo te enseñarán algo nuevo, sino que también te brindarán la oportunidad de compartir con otras personas que aprenderán y enseñarán cosas también de ti.
¿Cómo puedo encontrar un voluntariado viajando sola?
Gracias a plataformas como YoEmpresario, siempre he encontrado opciones en diferentes partes del mundo para intercambiar mis habilidades por alojamiento y, en algunos casos, comida. Para mí, hacer voluntariado es la mejor opción para una mujer que viaja sola.
¿Y tú, qué estás esperando?