Presentado por Caregiverlist, Inc.:
Trabajar en el cuidado de la salud es una excelente opción profesional, pero ¿y si no quieres trabajar en un hospital o clínica? Existen otras alternativas, como ser cuidador.
Como su nombre indica, los cuidadores brindan atención a personas mayores en sus hogares. Preparan comidas, ayudan con el baño y la limpieza, e incluso ofrecen apoyo médico básico. Un cuidador se encarga de asegurarse de que el paciente tenga todo lo necesario para sentirse cómodo y seguro.
Si estás buscando una carrera en el cuidado de la salud, esta podría ser la opción perfecta para ti. Aquí te contamos algunas razones:
Puedes ayudar a otros
Muchos de nosotros queremos sentir que nuestro trabajo hace una diferencia, pero es raro tener esa oportunidad. Como cuidador, puedes lograrlo.
Trabajarás con personas vulnerables que tienen necesidades específicas que tú puedes ayudar a satisfacer. Son personas en sus años dorados, y tú puedes asegurarte de que esos días se vivan con comodidad y apoyo.
Realmente puedes marcar la diferencia en la vida de los adultos mayores y sus familias, quienes pueden descansar tranquilos sabiendo que un ser querido está en buenas manos.
Es fácil conseguir trabajo
Hoy en día, es más sencillo que nunca conseguir trabajo como cuidador. En la mayoría de los estados, puedes obtener un certificado tras una capacitación mínima. En algunos lugares, la capacitación la proporciona el empleador para que puedas empezar a trabajar rápidamente.
Encontrar empleo también es sencillo con sitios web como Caregiverlist. Este tipo de plataformas también te conectan con capacitación e información para prepararte en esta carrera.
Libertad de ambientes de oficina
Trabajar en una oficina o clínica puede ser repetitivo y monótono. Te acostumbras a un horario fijo y haces las mismas tareas todos los días. Como cuidador, puedes eliminar esa sensación de encierro.
Puedes trabajar en diferentes lugares, con distintas personas y en horarios variados. Un día será diferente del otro, y esa variedad te mantendrá motivado y comprometido. Además, esto puede ayudarte a mantenerte saludable, ya que estar sentado todo el día no es bueno para la espalda ni para el corazón.
No solo tendrás libertad de espacios cerrados, sino que también podrás escoger horarios flexibles. Puedes trabajar por las tardes, noches, días, fines de semana, a tiempo parcial o según lo que mejor se adapte a ti. La carrera puede ajustarse a tu estilo de vida, no al revés.
Es un trabajo desafiante
A primera vista puede parecer sencillo, pero ser cuidador no es una tarea fácil. Debes estar atento en todo momento y asegurarte de que las necesidades del cliente estén cubiertas. También es importante que mantengas un ambiente seguro y limpio en el hogar, considerando las limitaciones y capacidades del paciente en todo momento.
Un cuidador también actúa como educador para el paciente y sus familiares y amigos. Les brindas información sobre los problemas que enfrentan y qué pueden esperar con el tiempo. Ser cuidador va más allá de limpiar y alimentar; se trata de crear un entorno de apoyo en todo momento.
Puedes mantenerte activo
Como ya mencionamos, ser cuidador implica moverse de un lugar a otro para apoyar a los pacientes en sus hogares. Dentro de la casa, ayudas en tareas como limpiar, cocinar, trasladar al paciente o ponerlo a dormir, entre otras.
Quizá te sorprenda lo cansado que puedes sentirte al final del día. Todo ese movimiento trabaja tu cuerpo y te ayuda a fortalecerte y mantenerte en forma. Y lo mejor es que te pagan por hacerlo, sin necesidad de pagar un gimnasio.
Adquieres nuevas habilidades
Como cuidador, estarás preparado para realizar diversas tareas, como gestionar citas, hacer diligencias, asistir en terapias físicas o controlar la presión arterial. Además, tendrás que brindar compañía y colaborar con la familia para mantenerlos informados.
Hay una lista interminable de conocimientos que un cuidador debe tener, y muchos de ellos los aprenderás con la experiencia. En poco tiempo, habrás desarrollado habilidades útiles tanto en tu carrera como en tu vida diaria.
Como puedes ver, ser cuidador es un trabajo desafiante, pero también muy gratificante. Si estos beneficios te parecen atractivos, considera comenzar una carrera en este campo tan especial.