Presentado por CMC Markets:
Las mujeres enfrentan un conjunto único de obstáculos a la hora de construir un fondo de jubilación seguro. Factores como una esperanza de vida más larga, posibles interrupciones en la carrera por responsabilidades de cuidado y una tendencia hacia inversiones más conservadoras pueden dificultar la acumulación de fondos suficientes para la jubilación. De hecho, estudios indican que las mujeres aportan un 30% menos que los hombres a sus cuentas de retiro. (1)
Por eso, a medida que te acercas a esta etapa, reevaluar tu plan de inversión es lo más recomendable. Esto asegura que esté alineado con tus necesidades financieras cambiantes. En este artículo, te compartimos estrategias esenciales para que las mujeres que se acercan a la jubilación puedan optimizar sus inversiones. Queremos empoderarte para que tomes decisiones informadas y logres una jubilación financieramente segura.
Invertir en ETFs para Diversificación
Los fondos cotizados en bolsa (ETFs) son fondos de inversión que se negocian en bolsas de valores. Funcionan igual que las acciones individuales y están diseñados para seguir un índice, sector, materia prima o clase de activo específica. Lo que diferencia a los ETFs es su capacidad para ofrecer una cartera de jubilación diversificada de manera instantánea. Al invertir en un ETF, te expones a un conjunto de activos, como acciones, bonos o materias primas.
Esta diversificación ayuda a distribuir el riesgo, reduciendo el impacto que puede tener el rendimiento de una sola inversión en tu portafolio general. Otra ventaja de los ETFs es su bajo costo. En comparación con los fondos mutuos tradicionales, suelen tener ratios de gastos menores, lo que significa que pagas menos en comisiones. Esto se debe a que los ETFs generalmente siguen un índice de forma pasiva, requiriendo menos gestión activa.
Para las mujeres que se acercan a la jubilación, los ETFs pueden ser un cambio radical. Piensa en los ETFs que pagan dividendos como un flujo constante de “cheques de bonificación” que llegan regularmente además de otros ingresos de jubilación. Y si prefieres una estrategia más automática, los fondos con fecha objetivo pueden ser tu piloto de inversión. Estos fondos ajustan automáticamente su composición hacia inversiones más conservadoras a medida que se acerca la jubilación.
Maximiza tus aportaciones para la jubilación
Si tu empleador ofrece un plan de jubilación, especialmente uno con aportaciones equivalentes, es fundamental que maximices tus contribuciones. Para quienes tienen 50 años o más, aprovecha las contribuciones adicionales permitidas en las IRA tradicionales y Roth, para acelerar tus ahorros.
Recuerda, el tiempo es tu aliado: incluso aportaciones modestas y constantes se acumulan significativamente a largo plazo. Estudios muestran que las mujeres suelen tener un perfil de riesgo más conservador al invertir. Aunque esto puede hacer que seas más reservada con tus inversiones para la jubilación, si puedes aportar más dinero a tu cuenta, estarás más cerca de asegurar tu futuro. (2)
Al acercarte a la jubilación, es recomendable reevaluar si tu tolerancia al riesgo sigue siendo adecuada para esta etapa de tu vida. Considera trabajar con un asesor financiero para determinar las mejores opciones de inversión según tu situación personal. Podrías beneficiarte de ir ajustando gradualmente tu distribución de activos a un perfil más conservador a medida que te acercas a la jubilación.
Construye estabilidad con bonos
Los bonos y las inversiones de renta fija suelen considerarse los “anclajes” de una cartera de jubilación. Son tu red de seguridad financiera, proporcionando un flujo de ingresos estable mediante pagos de intereses regulares. Este ingreso confiable puede ser un salvavidas durante la jubilación, brindando estabilidad y tranquilidad cuando ya no estás trabajando. A medida que te acercas a esta etapa, contar con ingresos confiables para cubrir tus gastos se vuelve más importante que buscar inversiones de alto riesgo y alta recompensa.
Existen diferentes opciones de bonos con distintos niveles de riesgo y potencial de retorno. Los bonos gubernamentales generalmente se consideran los más seguros, mientras que los bonos corporativos ofrecen mayores rendimientos pero con mayor riesgo. Los fondos de bonos facilitan la diversificación de tus inversiones en bonos, abarcando diferentes emisores y vencimientos.
Incluir bonos en tu estrategia de inversión puede reducir la volatilidad general de tu portafolio, algo crucial cuando ya no recibes un ingreso regular y necesitas que tus inversiones te proporcionen ingresos constantes durante la jubilación.
Considera inversiones que generen ingresos
A medida que te acercas a la jubilación, contar con un flujo de ingresos confiable se vuelve cada vez más importante. Ahí entran en juego las acciones que pagan dividendos. No solo tienen potencial de crecimiento, sino que también te ofrecen pagos regulares, como un “cheque de pago” que aporta estabilidad a tus ingresos de jubilación.
Otra opción a explorar son los fideicomisos de inversión en bienes raíces (REITs). Estas empresas poseen y operan bienes raíces que generan ingresos, como edificios de oficinas, centros comerciales y complejos de apartamentos. El rendimiento promedio de dividendos de los REITs en los últimos 25 años ha sido de aproximadamente un 9.05%, mucho más alto que el rendimiento del 7.97% del índice S&P 500 en ese mismo período. Puedes ampliar tu portafolio de jubilación invirtiendo en instrumentos de renta fija que generen ingresos. (3)
Es importante ser cautelosa al considerar inversiones enfocadas en generar ingresos. Aunque las altas rentabilidades pueden parecer atractivas, recuerda el dicho: “Si suena demasiado bueno para ser verdad, probablemente lo sea.” Esas rentabilidades elevadas podrían implicar asumir más riesgo del que te sientes cómoda soportando.
Conclusión
El mercado de inversiones para una mujer que se acerca a la jubilación requiere una estrategia bien pensada. Recuerda que nunca es tarde para ajustar tus estrategias y lograr una cartera diversificada. Buscar asesoramiento profesional puede ser muy valioso. Un asesor financiero te ayudará a crear un plan personalizado basado en tus metas financieras y tu tolerancia al riesgo.