¿Qué es el team building virtual y por qué es importante?
Si buscas en Google Trends, notarás un aumento en las búsquedas relacionadas con el team building virtual entre el 7 y el 20 de marzo de 2025. Fue en ese momento cuando muchos países entraron en confinamiento, y empleados que solían trabajar en oficina comenzaron a hacerlo desde casa.
Este fenómeno demuestra la necesidad de mantener la conexión con nuestros colegas. Sin importar las circunstancias, el team building virtual es fundamental para gestionar una oficina remota exitosa.
¿Qué es el team building virtual y cómo puede beneficiar a tu empresa?
El team building virtual consiste en actividades diseñadas para fortalecer la colaboración y el espíritu de equipo a través de plataformas digitales. ¿Cómo puede esto impulsar el éxito de tu negocio? Y, ¿cómo hacerlo bien, incluso si algunos miembros del equipo nunca se han conocido en persona?
Ya sea que tu equipo esté formado por empleados, colegas, contratistas, clientes o una combinación de todos, un trabajo en equipo efectivo es clave en prácticamente cualquier empresa.
¿Qué actividades puedes realizar para construir un equipo virtual fuerte?
En la era del trabajo desde casa, trasladar las ventajas de actividades creativas y novedosas de team building a plataformas virtuales se ha convertido en una necesidad. Aquí te compartimos tres pasos esenciales para fortalecer tu equipo en línea:
Paso 1: Programar reuniones de seguimiento
Una rápida charla de 5 a 10 minutos con tu equipo para preguntar cómo están puede marcar la diferencia. Es recomendable reservar esas pequeñas conversaciones que normalmente enviarías por correo o mensajería instantánea para estos encuentros regulares.
En un contexto donde todos enfrentan sobrecarga de trabajo, un toque personal que demuestre interés hará que tus colegas se sientan apoyados. Además, canalizar pequeñas dudas en estas conversaciones ayuda a liberar espacio mental para todos durante el día.
Paso 2: Aprovechar las plataformas de videollamada
Sabemos que el cansancio por pantallas es real, pero debemos adaptarnos a las herramientas disponibles. Hoy en día, la mayoría usamos plataformas como Zoom, Teams, Skype o Google Meet.
Para quienes han estado en casa solos durante meses o extrañan la interacción espontánea, formar pequeños equipos que trabajen de manera independiente pero se conecten en estas plataformas durante el día puede mejorar la colaboración y simular un ambiente de oficina.
Al principio, puede parecer extraño trabajar en silencio con unos colegas en la pantalla, pero pronto te acostumbrarás. Los momentos en los que puedas decir “¿Puedo comentarte una idea?” serán tan valiosos como una charla en persona.
Prueba inicialmente sesiones cortas de unas horas una vez a la semana y ajusta según la experiencia. Muchas personas disfrutan tanto esta dinámica que la incorporan en su rutina semanal.
Paso 3: Diseñar actividades con propósito
Cuando estamos en el mismo espacio, compartir energía y ideas en una pizarra, a veces solo una conversación basta para conectar. Pero en plataformas virtuales, es importante crear actividades que unan al equipo, especialmente si nunca se han visto en persona.
Por ejemplo, en una entrevista reciente, un experto sugirió que todos compartieran una comida para fortalecer vínculos. Se puede enviar una receta con antelación para preparar un plato juntos o pedir que todos pidan la misma comida en un restaurante cercano.
Compartir comida es una excelente forma de crear lazos, y cocinar en grupo, aunque sea virtualmente, puede ser muy divertido y fortalecer relaciones, especialmente en equipos pequeños donde los participantes pueden comparar métodos y experimentar algo nuevo juntos.
Si sientes que estás pegado a la pantalla desde hace meses, el término ‘team building virtual’ puede parecerte agotador. Pero, precisamente por eso, es más importante que nunca cultivar buena comunicación, confianza y empatía con tus colegas.
Así que, ¡a Zoomear se ha dicho! Y recuerda, esto no será para siempre.
Sobre la autora
Esta es una profesional nacida en California y residente en Londres, con un objetivo claro: democratizar el poder en los niveles ejecutivos. Con casi 20 años de experiencia en las principales escuelas de negocios del mundo y con tres títulos académicos, aboga por un liderazgo ético y el impacto social en los negocios.
Además de su trabajo en una prestigiosa escuela de negocios, es coach de admisiones de MBA, consultora en capital humano y madre de un niño muy activo.
También produce y conduce un exitoso podcast, que ha sido reconocido en varios países, abordando temas de carrera y liderazgo.