Viajar barato para extender tu viaje es totalmente posible. Aquí te comparto algunos consejos que me han funcionado en el camino y que seguramente te serán útiles si quieres viajar mucho sin gastar de más.
En los más de cinco meses que llevo viajando, mis amigos y conocidos en redes sociales suelen preguntarme cómo hago para viajar tanto tiempo, cómo me financio, si soy millonaria o si mis padres lo son. La realidad es que no, ni mi familia tampoco. Tampoco ahorré durante años para irme de viaje; simplemente, cuando sentí que tenía lo suficiente, agarré mi mochila y me lancé a la aventura.
Lo que me ha ayudado a mantener estos meses de viaje ha sido más la astucia y el buen ojo para aprovechar las oportunidades.
Consejos para viajar barato
Hacer voluntariados:
La principal estrategia que me ha permitido viajar barato ha sido voluntariar a través de plataformas de voluntariado: a cambio de unas horas de trabajo diario, obtengo alojamiento y, en algunos casos, comida y/o dinero para gastos.
También hay lugares que ofrecen beneficios extra, como clases de yoga, idiomas, alquiler de bicicletas, tablas de surf, descuentos en bares y tours, entre otros.
Aquí puedes explorar las muchas opciones disponibles para hacer voluntariados en todo el mundo.
Al aplicar a los voluntariados, presta atención a las horas de trabajo semanales y a qué obtienes a cambio. Elige las opciones que más te convengan; por ejemplo, preferiría uno que ofrezca alojamiento y comida por 30 horas de trabajo a uno que solo brinde alojamiento.
Antes de aceptar, también es importante que hables con la persona de contacto para aclarar las tareas y evitar malentendidos, ya que a veces las descripciones son vagas.
Aquí tienes un video que explica detalladamente cómo funciona la plataforma:
Piensa dos veces antes de comprar impulsivamente:
Otra estrategia que me ha ayudado a viajar barato es observar bien antes de pagar por algo. Por ejemplo, al inicio de mi viaje gastaba mucho en productos como shampoo, acondicionador, jabón, etc., que luego no podía llevar conmigo porque viajo con equipaje de mano y líquidos de más de 100 mL no están permitidos.
Muchos huéspedes dejan productos casi nuevos en los hostels, ya que la mayoría no los desecha, sino que los guarda para quien los necesite. En lugar de comprar en el supermercado, suelo revisar en el hostel y muchas veces encuentro lo que necesito.
Lo mismo pasa con la comida: algunos huéspedes compran 1 kg de arroz para una noche, usan solo una taza y el resto queda en la despensa comunitaria, disponible para todos.
Por eso, antes de ir al supermercado, revisa las despensas compartidas. Así puedes ahorrar dinero y tiempo, y evitar desperdiciar comida. Además, busca siempre los supermercados más económicos.
Cocinar:
Otra clave para ahorrar es que el hostel tenga cocina. Esto es esencial, ya que te permite preparar tu propia comida, que suele ser más barata y más deliciosa que comer en restaurantes o en puestos turísticos.
Por supuesto, también puedes probar la gastronomía local en restaurantes recomendados por locales, en lugar de los lugares llenos de turistas que a veces ofrecen menús menos auténticos.
Aplicaciones para buscar transporte más barato:
Para desplazarte de un lugar a otro, ya sea en bus, avión, tren, barco o coche, no siempre es necesario reservar con meses de anticipación, salvo en vuelos internacionales o de larga distancia.
He descubierto que, en un mes y a pocos días de viajar, algunos pasajes mantienen sus precios. Para planificar mejor, uso aplicaciones como Rome2Rio: ingresas tu punto de salida y destino, y te muestra diferentes opciones de transporte, combinándolos y clasificándolos por precio y duración. Así, supe que la forma más conveniente de viajar de Döbriach, Austria, a Milán, Italia, era tomar un autobús hasta Villach y luego un BlaBlaCar hasta Milán. La tecnología facilita mucho estas decisiones.
Vuela barato:
Si prefieres viajar en avión y quieres ahorrar, te recomiendo las aerolíneas low cost. Estas compañías ofrecen tarifas ajustadas, vendiéndote solo lo esencial. Por ejemplo, si solo viajas una semana, no necesitas maletas grandes, ya que muchas aerolíneas económicas solo permiten un equipaje de mano.
Estas aerolíneas cobran por el pasaje y tasas, y si quieres escoger asiento, pagarás un extra. Lo mismo con comida a bordo u otros servicios adicionales.
Es importante que revises bien los detalles: muchas permiten llevar un equipaje de 8-10 kg en cabina sin costo, pero algunas, como Ryanair, solo incluyen una pequeña mochila o bolso que quepa debajo del asiento.
Si quieres llevar más equipaje, deberás pagar adicional, y lo mismo si quieres llevar instrumentos musicales o equipaje en bodega.
Desde que empezó esta política en 2018, suelo simular la compra en la web de Ryanair para conocer el precio final con mi mochila y compararlo con otras aerolíneas en buscadores.
Los buscadores que más uso son Kayak y Skyscanner. La primera para vuelos dentro de Europa, y la segunda para vuelos internacionales. También ofrecen la opción de buscar “cualquier lugar” y te muestran los destinos más económicos según la fecha seleccionada.
Otra opción útil en Europa es GoEuro, que permite buscar vuelos, trenes y autobuses, y te redirige a las páginas oficiales para comprar.
Un último consejo para viajar barato…
Finalmente, te recomiendo organizarte con otros viajeros: “la unión hace la fuerza”. Compartir compras y dividir gastos ayuda mucho. En un hostel donde hice voluntariado, un grupo de seis personas compraba en conjunto y cocinaba para todos, creando lazos que aún perduran.
Aquí tienes otros consejos para ahorrar en tu viaje.
Viajar barato no es una utopía, es totalmente posible. No lo pienses tanto, agarra tu mochila y ¡que comience la aventura!