Presentado por Redcap y Truss:
En el mundo de los negocios, las decisiones se toman a diario. Algunas decisiones, como contratar a un nuevo miembro para el equipo, pueden ser cruciales a corto plazo. Otras, como negociar una fusión empresarial entre dos compañías, serán mucho más importantes a largo plazo.
Las fusiones empresariales ocurren con frecuencia, pero el proceso suele ser complejo y multifacético. Antes de la fusión, se debe llevar a cabo una negociación exhaustiva que aborde temas como el precio de compra y las representaciones legales. Es muy recomendable consultar a una firma asesora de negocios para que te guíe durante el proceso de negociación.
Para que una fusión empresarial sea exitosa, todas las partes relevantes deben reunirse para acordar un conjunto de condiciones. En este proceso, aquí tienes una guía sobre cómo tu empresa puede negociar una fusión empresarial:
Precio de compra
El factor más importante que se negociará es el precio de compra de toda la fusión. Todas las empresas involucradas deben presentar sus mejores ofertas desde el principio. El precio de compra se negocia considerando diversos factores, como la forma en que se pagarán los fondos.
En otros casos, el precio reflejará qué parte será propietaria de otras fuentes de ingreso. Áreas como derechos a dividendos o preferencias de liquidación deberán discutirse antes de cerrar la fusión. Si alguna parte tiene ideas sobre cómo negociar eficientemente el precio de compra, será necesario abordarlas en algún momento.
Representaciones legales
También hay muchos aspectos relacionados con los derechos sobre diferentes propiedades. Por ejemplo, los títulos de activos y los estados financieros serán una parte importante de lo que cada empresa aporta. En algunos casos, la propiedad intelectual de una tecnología también será discutida en términos de propiedad.
Estrategia
Una vez que se hayan discutido los factores clave como el precio de compra y la propiedad de los activos, llega el momento de planificar la estrategia. La fusión empresarial solo debe perseguirse con un objetivo claro en mente. Por ejemplo, dos empresas pueden unirse para ingresar a un nuevo mercado. Los activos combinados aquí pueden permitir que el negocio alcance nuevas alturas.
Por ello, nunca es demasiado pronto para empezar a pensar en cómo hacer que la fusión sea lo más efectiva posible. Cada empresa tendrá sus propias fortalezas, que pueden aprovecharse durante todo el proceso.
Comunicación
La comunicación es fundamental para que una fusión se lleve a cabo con éxito. Este será un momento crítico para todas las partes involucradas en cada empresa. No debe haber espacio para suposiciones, ya que la transparencia será clave en cada fase. Programa reuniones con los profesionales principales y prepárate para discutir cuáles son tus objetivos.
Si es necesario, también puedes tratar asuntos confidenciales en privado. Todos los empleados deben estar informados sobre la fusión con suficiente antelación. Sin embargo, puede haber otros temas que requieran discusión privada con personas específicas, como el presidente de cada empresa. De esta forma, todas las partes quedarán satisfechas al final del proceso.
Metas y objetivos
Superar el llamado «techo de cristal» es algo que toda empresa desea lograr. Obtener beneficios en áreas en las que nunca se había incursionado puede ser una experiencia muy emocionante. Por eso, en las etapas iniciales de las negociaciones de la fusión, piensa en tus metas a corto y largo plazo.
Las metas a corto plazo son importantes por varias razones. Primero, demuestran que la fusión está funcionando como se esperaba, lo que te permite seguir en esa dirección. La investigación es fundamental. Querrás asegurarte de tomar los pasos correctos. Una vez que esas proyecciones se cumplan, el éxito estará al alcance de la empresa.
Asesores
Cuando se trata de planificar el futuro, puede ser conveniente contar con asesoría externa. No es raro que empresas de todos los tamaños busquen los servicios de un asesor profesional. Estos expertos provienen de diferentes ámbitos, lo que puede ser muy útil para cada parte.
Por ejemplo, los asesores pueden ayudar a cada empresa con aspectos financieros de la negociación. Temas como la estructuración fiscal deberán discutirse en algún momento del proceso. Además, cada etapa de negociación requerirá la elaboración de contratos. Es recomendable buscar estos servicios lo antes posible.
Una vez que el proceso esté en marcha, la negociación avanzará de manera más eficiente. Solo asegúrate de abordar todos los temas importantes desde el principio y de manera sincera. La claridad es esencial para que la nueva empresa pueda aprovechar los beneficios al final del proceso.