Establece Medidas de Seguridad
Con la reapertura de tiendas y negocios tras semanas o meses de confinamiento, los gobiernos locales han emitido directrices de seguridad que las empresas deben seguir para proteger a sus empleados y clientes. Es posible que necesites mantener un riguroso programa de limpieza, proporcionar el equipo de protección personal necesario para los empleados que regresan a la oficina y hacer ajustes en los espacios de trabajo para mantener la distancia social y otras barreras entre los trabajadores.
Asegúrate de que tus operaciones cumplan con las directrices. Mantén medidas de seguridad estrictas y, siempre que sea posible, sé aún más cuidadoso de lo requerido. Esto implica ofrecer limpiezas más frecuentes o permitir que tus empleados sigan trabajando desde casa si así lo desean, incluso si las infecciones están en descenso en tu ciudad.
Sería recomendable abastecerte de suministros esenciales, ya que en las primeras fases de la pandemia, artículos vitales como el equipo de protección personal, productos de limpieza, desinfectantes y papel eran escasos. Considera mantener un stock razonable para evitar aglomeraciones en caso de que una segunda ola de COVID-19 interrumpa tu suministro.
Toma Buenas Decisiones Financieras
Si tu negocio está luchando por mantenerse a flote, tómate un tiempo para reevaluar tus finanzas y detectar dónde puedes reducir costos sin despedir a tus empleados. Intenta desarrollar un plan general de reducción de gastos y convertir tantos costos fijos en variables como sea posible para ajustar tus ingresos.
Si la demanda ha disminuido, quizás debas reconsiderar tu plantilla, contratando solo al personal esencial y permitiendo que los empleados despedidos sigan recibiendo beneficios por desempleo hasta que tengas suficientes clientes y beneficios para reactivar la plantilla completa.
Además, si has tenido la suerte de sobrevivir a la pandemia con pocas pérdidas financieras, asegúrate de tener fondos ahorrados en caso de que una segunda ola tenga un impacto más severo en tu organización.
También puedes aprovechar apoyos financieros del gobierno. Programas como préstamos para interrupciones comerciales están diseñados para ofrecer soporte a pequeñas y medianas empresas afectadas por la pandemia, mediante garantías de préstamos gubernamentales. Consulta las opciones disponibles y elige la que mejor se adapte a tu negocio, ya sea un préstamo sin complicaciones o una línea de crédito flexible respaldada por tus cuentas empresariales.
Mejora tu Presencia en Línea
Con las órdenes de confinamiento, los consumidores se volcaron a las compras en línea, incrementando las ventas del comercio electrónico en cifras récord. Por ello, tu negocio debe estar preparado para ampliar su presencia digital. Si ya tienes un sitio web, quizás también debas lanzar una plataforma de comercio electrónico para vender productos y servicios en línea, según el tipo de negocio que tengas.
Además, debes trabajar en tu marca, organizar tu departamento de envíos y potenciar tu marketing, especialmente la publicidad en buscadores.
Más allá de la presencia en línea, considera usar tecnología digital en otras áreas del negocio. Muchas pequeñas y medianas organizaciones aún dependen de procesos manuales en papel, los cuales no funcionan cuando las personas están en diferentes ubicaciones físicas y limitan el crecimiento de la empresa.
Capacita a tus Empleados
Es fundamental educar a tus empleados sobre cómo responder ante un posible brote en tu organización. Diseña un plan para que notifiquen a sus supervisores si dan positivo en COVID-19 o si han estado en contacto cercano con alguien enfermo.
También es importante contar con personal que pueda reemplazar a quienes estén enfermos. Considera capacitar a empleados en funciones críticas que no puedan postergarse y dales acceso a las herramientas necesarias para tomar el relevo en poco tiempo. Además, si algunos empleados han tenido dificultades para adaptarse al trabajo remoto y a las herramientas digitales, ofrece capacitación adicional para facilitar el trabajo desde casa y mantener el contacto en el futuro.
Revisa las Políticas de Trabajo a Distancia
Durante el confinamiento, el trabajo remoto se convirtió en parte esencial de la nueva normalidad. Muchas empresas tuvieron que adaptarse completamente en línea, enfrentando desafíos y aprendiendo lecciones importantes. Ahora, puede ser un buen momento para analizar lo aprendido y evaluar cómo ha afectado esto a tu organización.
Considera adquirir nuevos programas, hacer ajustes necesarios para que tus empleados sean más efectivos desde casa, proporcionar mejor equipo y explorar una transición semi-permanente hacia servicios remotos hasta que la pandemia esté controlada.