Los efectos de la prohibición de efectivo
De cada intervención en la política económica surge otra más: pasamos de la idea de intereses negativos a la de prohibir el efectivo para poder aplicar esa política. Cuando el dinero solo existe en las cuentas bancarias y pierde valor allí, nadie querrá ahorrar. Lo más inteligente será consumir y, por supuesto, pagar impuestos indirectos en cada compra.
Además, para políticos y quienes dependen del Estado, prohibir el efectivo facilita mucho el control de movimientos, gravarlos e incluso confiscar dinero en momentos difíciles.
Una vez instaurada esta prohibición, la tendencia intervencionista seguramente seguirá, alcanzando el oro y otros metales preciosos, e incluso vetando las criptomonedas. Aunque, por suerte, esto último no es algo que el Estado pueda hacer de forma efectiva.
La alternativa en estos casos es mantener tu dinero fuera del país en una cuenta bancaria offshore. Lo mismo aplica para metales preciosos y otros bienes: es recomendable almacenarlos en jurisdicciones donde el riesgo de confiscación o expropiación sea mínimo. Es decir, hay que evitar países con alta deuda, inestabilidad financiera o gastos públicos elevados.
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¿Quién está detrás de la prohibición del efectivo?
Probablemente esperas que hablemos del Club Bilderberg o de conspiraciones judeomasónicas. Pero no vamos por ese camino.
¿Crees que en el futuro cercano se prohibirá el efectivo? Tienes todo el derecho a dudar, y si eres una persona crítica, seguramente ya no tienes tan claro lo que te dicen las noticias y los políticos.
Economistas como Paul Krugman no son los únicos que apoyan estas ideas. Otros como Larry Summers, exministro de Finanzas de Estados Unidos, han pedido públicamente eliminar el dinero en efectivo. También Kenneth Rogoff y Willem Buiter, de Citigroup, siguen la misma línea.
La supuesta “criminalidad” del efectivo es solo una excusa para esconder las verdaderas intenciones.
Prohibir el efectivo podría ser un golpe duro para el mercado negro y el de las drogas, que, por otro lado, probablemente no existirían sin las prohibiciones estatales. Sin embargo, esto sería solo un efecto secundario.
Como afirmó en una revista el economista alemán Peter Bofinger, una vez que desaparezca el efectivo, no habrá obstáculos para introducir intereses negativos.
Kenneth Rogoff lo explica claramente:
“El dinero en efectivo es el principal obstáculo para seguir bajando los intereses del Banco Central. Deshacernos de él sería una solución sencilla y elegante a este problema.”
Más allá de que los bancos puedan seguir bajando los intereses hasta llegar a los negativos, eliminando el efectivo también resolverían otro problema importante: el coeficiente de caja.
Legalmente, los bancos deben mantener una cantidad mínima de reservas líquidas. Pero si nadie puede retirar dinero en efectivo, el riesgo de que todos los clientes saquen su dinero a la vez desaparece, ya que no existe el efectivo.
Como ves, la prohibición del efectivo traería muchas ventajas tanto para los bancos como para los políticos que los respaldan y que buscan implementar políticas cada vez más intervencionistas.
Primeros pasos hacia la prohibición del efectivo
Si aún no tienes claro que las políticas de políticos y economistas puedan llegar a implementarse, mira los avances que ya se han dado en esta dirección:
- Francia: Limitó los pagos en efectivo a 1.000 euros. La compra de oro debe notificarse a las autoridades y el transporte dentro del país requiere aviso previo.
- Grecia: El límite para pagos en efectivo es de 500 euros.
- España: Actualmente, se puede pagar en efectivo hasta 2.500 euros, pero hay planes para reducirlo a 1.000 euros, y en algunos programas electorales ya se habla de eliminar el efectivo por completo.
- Dinamarca: Existen planes para eliminar completamente el dinero en efectivo.
- Alemania: Aunque no hay límite actualmente, se estudia establecerlo en 5.000 euros.
La prohibición del dinero en efectivo llegará
Hasta que las personas entiendan que el problema no son solo las tasas de interés, sino el dinero impreso y creado de la nada por los bancos, seguirán perdiendo mucho dinero.
Lo recomendable es protegerse poniendo el dinero en cuentas bancarias fuera del país, en jurisdicciones seguras.
Las cuentas offshore ofrecen muchas ventajas, además de la seguridad, y pronto hablaremos más sobre esto en nuestro blog (puedes suscribirte).
También puedes invertir en metales preciosos u otros bienes, diversificando y almacenándolos en diferentes lugares del mundo. La criptomoneda es otra opción válida.
La prohibición de pagos en efectivo llegará, y en Europa ya se discute e implementan limitaciones. La resistencia a estas medidas es fuerte, pero cada vez quedan menos opciones para los políticos y burócratas. Aprovecharán la lucha contra la corrupción y el blanqueo para justificar estas restricciones y escapar del fin del sistema basado en deuda e inflación.
Al final, si no prohíben el efectivo, no podrán imponer tasas de interés negativas para seguir financiando su fiesta. Las opciones del Banco Central Europeo se agotan.
En la Unión Europea, esta prohibición podría convertirse en realidad pronto, quizás empezando por Grecia, aunque nunca se sabe quién será el siguiente. ¡Hagan sus apuestas!