1. No Tener Datos Suficientes
Necesitas datos confiables y en tiempo real sobre el progreso de tus productos, cómo se están manejando y las condiciones en las que se encuentran. Datos rápidos y precisos te permiten responder rápidamente a retrasos o solucionar contratiempos sin defraudar a tus clientes. Más de la mitad de los encuestados en un estudio reciente indicaron que en febrero y marzo de 2025 tuvieron dificultades para obtener información sobre la cadena de suministro desde China, dificultando saber qué pasó con sus pedidos y satisfacer a clientes impacientes.
Esto es aún más importante si envías productos sensibles a la temperatura o frágiles que requieren un manejo cuidadoso y condiciones específicas. Los consumidores tienen poca paciencia con pedidos que llegan dañados o con una apariencia diferente a la esperada. Un sistema de monitoreo de temperatura en la cadena de frío que proporciona datos en tiempo real te ayuda a garantizar que los productos lleguen en perfectas condiciones y sin ser comprometidos.
Por supuesto, esto requiere un sistema digitalizado de análisis de la cadena de suministro. Llevar el seguimiento de tus envíos con una hoja de cálculo de Excel actualizada manualmente cada vez que recibes una alerta por correo electrónico no será suficiente, ni siquiera para pequeñas empresas emergentes.
2. Seguir los KPIs Incorrectos
Establecer los KPIs adecuados te permite medir las métricas correctas, para que puedas enfocar tus esfuerzos en los aspectos que más impactan en tu negocio. Trabajar con KPIs bien elegidos te obliga a entender las principales preocupaciones de tus clientes, como retrasos en la entrega, precios o el estado de los productos al llegar.
Por ejemplo, tus KPIs podrían centrarse en los tiempos de cumplimiento, lo que te lleva a priorizar al proveedor logístico más rápido, aunque sea más costoso. Pero si tus clientes están dispuestos a esperar unos días más por envío gratis, quizás te convenga trabajar con otro socio de envío. Descubre cuáles son los KPIs más importantes para tu mercado, tu producto y las necesidades de tu negocio.
También es fundamental alinear los KPIs en todos tus equipos para optimizar toda la cadena de suministro. No tiene sentido ahorrar dinero combinando pedidos en menos envíos si eso significa contratar más personal en el almacén para manejar el volumen.
3. Olvidar Planificar lo Imprevisto
Si hay una lección que todos deberíamos haber aprendido en 2025, es que la resiliencia es clave. Desastres naturales, huelgas, cambios políticos y otros imprevistos pueden ocurrir en un abrir y cerrar de ojos y afectar tu cadena de suministro. No construyas una cadena tan rígida que cualquier retraso o interrupción pueda desajustar todo el sistema.
También debes prever el crecimiento futuro de tu negocio. Cuando tu empresa escale, ¿tu cadena de suministro podrá seguir el ritmo? Puede que funcione bien con 40 pedidos diarios, pero ¿qué pasa cuando tengas que manejar 80, 150 o más?
Debes encontrar ese equilibrio entre mantener una estructura eficiente y evitar gastar innecesariamente en socios alternativos que no aportan valor real.
4. Crear una Red Aislada
Los equipos aislados generan una cadena de suministro fragmentada y con poca visibilidad. Esto es más común en cadenas de suministro grandes y complejas, pero las decisiones que tomes al inicio de tu negocio determinarán si tus equipos y herramientas trabajan en conjunto o en aislamiento.
Cuando los datos están en plataformas separadas, será difícil detectar oportunidades para reducir costos o identificar el origen de las interrupciones.
Prepárate ahora para una cadena de suministro unificada y totalmente visible, asegurando que los datos de logística, almacenamiento, proveedores y otros socios se integren en una sola plataforma para análisis. Además, establece métodos de comunicación sencillos para todos los involucrados.
5. Poner el Precio por Encima de Todo
Quieres gastar lo mínimo en la gestión de la cadena de suministro, pero también buscas un servicio y una ejecución de excelencia.
Si solo buscas los socios más baratos, es probable que comprometas aspectos como la fiabilidad, la rapidez o la transparencia en los niveles de calidad. Tus socios logísticos son fundamentales para el éxito de tu negocio, así que invierte un poco más en un socio que siempre te respalde.
Las relaciones comerciales en tu cadena de suministro deben ofrecer valor, tanto cualitativa como cuantitativamente.
6. Ignorar los Controles de Seguridad
Ignorar o descuidar la seguridad puede traer problemas graves. Las regulaciones de privacidad de datos están en aumento, y una brecha puede acarrear multas considerables y daños a la reputación de tu negocio.
Asegúrate de que todos tus proveedores, vendedores y socios cumplan con los requisitos de seguridad y estándares de protección de datos.
Es igualmente importante proteger tu producto físico. Usa herramientas de monitoreo logístico que te alerten si alguien intenta manipular el embalaje y coloca sellos o cerraduras a prueba de manipulaciones en los contenedores, para que puedas detectar cualquier intento de robo o alteración.
La Gestión de la Cadena de Suministro No Tiene Por Qué Ser un Campo Minado
La gestión de la cadena de suministro es uno de los elementos clave para el éxito de cualquier negocio, sin importar qué producto vendas. Prestando atención a la disponibilidad de datos, la optimización de KPIs, la seguridad, evitando silos, planificando para imprevistos y cuidando la relación con cada socio, los nuevos empresarios pueden evitar los errores más comunes y encaminarse hacia el éxito.