La mejor parte de alojarse en hostels es que atraen a una gran variedad de personas. Nunca sabes con quién te vas a encontrar.
A veces, sin embargo, eso no siempre es bueno.
He conocido todo tipo de mochileros que creen que un dormitorio de diez camas significa que son los únicos que están durmiendo allí.
O que su mamá limpiará su desastre en la cocina del hostel.
Sigo sorprendido por los comportamientos que veo en los hostels — dejar platos sucios, tener sexo en las habitaciones compartidas, o estar borrachos, ebrios y sin importarles, y luego enojarse si alguien no les dejó dormir un rato.
A veces pienso que antes de que todos se queden en un hostel, debería haber una clase sobre cómo comportarse correctamente en uno. Así serás recordado por ser la persona increíble que eres en lugar del idiota que despertó a todos a las 3 de la mañana.
Después de años viajando y miles de estancias en hostels, aquí tienes consejos de etiqueta hostel para inspirar amor, no odio, entre tus compañeros viajeros:
1. Mantén el silencio
No esperes que camines de puntillas durante el día, incluso si alguien está tomando una siesta. Hay un acuerdo no escrito de que durante el día, el dormitorio compartido es para todos.
Sin embargo, después de las 10 p.m. o 11 p.m., baja el volumen. ¡La gente intenta dormir! A ti te encanta dormir, ¿verdad? Lo mismo todos los demás. Los dormitorios son para dormir, no para fiestas. No es cool que te despierten en medio de la noche por personas ebrias o parlanchinas. Si vas a hablar, sal del cuarto y hazlo afuera.
En un dormitorio grande, es difícil mantener el silencio perfecto — todos lo entienden. Por eso llevamos tapones para los oídos. Pero si estás en un dormitorio más pequeño, tu ruido se escuchará mucho más fácilmente, y los tapones no siempre funcionarán.
Y por favor, ¡no hagas caca en el cuarto tampoco!
2. Mantén las luces apagadas
Siguiendo con este tema, si ya pasaron las 11 p.m. o antes del amanecer, mantén las luces apagadas. Usa una linterna, una pequeña lámpara frontal o el brillo de tu teléfono para encontrar lo que buscas. Hay personas en el cuarto que quizás no puedan dormir con las luces encendidas. Por favor, no los molestes.
3. Mantén la cocina limpia
Tu mamá no está aquí y nadie quiere enfermarse por comida en mal estado. Apuesto a que tú tampoco. Lava tus platos cuando termines de usarlos, y con “lavar” quiero decir con jabón, no solo enjuagarlos con agua tibia. Si aún queda una capa en la sartén, no está limpia.
Y si usaste la última olla, límpiala para que la siguiente persona pueda cocinar sin tener que fregarla. No la dejes sucia.
(Y, personalmente, como no confío en que la gente siga esta regla, siempre limpio mis platos ANTES de usarlos. Nunca se puede ser demasiado cuidadoso con los gérmenes.)
4. Mantén los baños limpios
Supongo que no dejas el baño sucio en tu casa, ¿verdad? Entonces, ¿por qué hacerlo en el hostel? ¿Cuántas veces has entrado a un baño de hostel y casi vomitas de la impresión? Muchas. Yo también.
Eso es lo que sienten todos cuando usan el baño después de que tú lo dejaste hecho un desastre y parece que necesitas un traje de bioseguridad para atravesarlo. Por favor, tira la basura, el papel higiénico y todo lo que uses en la papelera, no orines en el suelo y, si tienes que vomitar, hazlo en el inodoro, no en el lavabo o la ducha.
5. Empaca con anticipación
Es difícil dormir en los hostels. Todos están empacando y yéndose. Llegan nuevas personas. El de arriba está roncando como un tren de carga. Cualquier cosa que ayude a dormir más tarde siempre se agradece.
Por eso, a los viajeros les encanta cuando empacan la noche anterior para reducir el ruido en la mañana. Si tienes que levantarte a las 4 a.m. para tomar tu vuelo temprano, empaca la noche anterior y prepara tu ropa para no tener que abrir cada bolso o hacer ruidos con las cremalleras. El ruido de las cremalleras puede ser molesto. Sabes que no puedes eliminarlo por completo, pero hacer un esfuerzo por mantenerlo bajo es un acto de amabilidad muy valorado.
6. Evita las bolsas de plástico
Peor que escuchar a la gente empacar su maleta es escuchar el ruido que hacen con las bolsas de plástico. ¡Hacen mucho ruido! Este es mi mayor fastidio. Si el ruido dura mucho, incluso diré algo. Así que, como al empacar, guarda las bolsas de plástico la noche anterior. Porque no hay forma de amortiguar ese sonido.
7. Mantén la privacidad
No hagas sexo en las habitaciones compartidas. En serio, nadie quiere escucharte o que entres sin querer en medio de eso. Hay una forma correcta de tener sexo en un hostel y una forma incorrecta — y en la habitación compartida es la incorrecta.
8. Apaga la fiesta de baile
Por muy genial que sea escuchar música a todo volumen, algunos no pueden dormir con ella. Aunque ayuda a bloquear otros ruidos, mantenerla demasiado alta molesta a los demás. No quiero dormir con la banda sonora de tu vida. Además, ¿para qué volverte sordo mientras duermes? Eso es algo que se hace durante el día. Mantén el volumen bajo.
9. Usa audífonos
Si haces una llamada, hablas por Skype o ves una película, usa audífonos. El resto del cuarto no quiere escuchar lo que estás haciendo. Si necesitas llamar y no tienes audífonos, ve a la sala común. Puedes hacer la llamada en el pasillo durante el día, pero no quedarte allí hablando en la noche.
¿Por qué? Porque todos podemos escucharte. Sé respetuoso con los demás. Usa audífonos.
También, apaga las notificaciones de tu teléfono por la noche. Es genial que hables con gente antes de dormir, pero no necesitamos escuchar cada pitido, zumbido o tono divertido que hayas configurado en tus apps. Algunos olvidan y, de repente, toda la habitación se llena con tu ringtone a las 3 a.m.
10. No monopolices el baño
La mayoría de los hostels tienen espacio limitado en los baños y duchas. No pases 40 minutos en la ducha y uses toda el agua caliente. Sé rápido para que todos puedan ducharse y prepararse. ¡Es un espacio compartido, recuerda!
11. Comparte los enchufes
Aunque hoy en día la mayoría de los hostels tienen muchas tomas de corriente, algunos no. No ocupes más de un enchufe para que todos puedan cargar sus dispositivos. Todos necesitan su teléfono o computadora para planear y comunicarse, igual que tú. Conectar todos tus aparatos a la vez y bloquear que otros carguen los suyos es una actitud egoísta. ¡No seas así!
12. Sé considerado al lavar ropa
Si lavas tu ropa y no hay secadora, asegúrate de colgarla en tu parte de la litera, no por todo el cuarto. A veces, otros quieren lavar algo y si tienes toda tu ropa colgada por todas partes, no es muy considerado. Todos tenemos que lavar cosas, pero puede ser molesto cuando una persona llena todo con sus prendas.
13. No comas la comida de otros ni tomes su cerveza
Es sorprendente cuántas personas abren la nevera y actúan como si fuera su casa, tomando una cerveza sin permiso. Claro, debemos cuidar nuestras cosas y etiquetarlas en los hostels, pero la regla es simple: si no te gustaría que alguien más comiera tu comida o tomara tu bebida, no lo hagas tú con las de otros. Muchos hostels tienen un armario compartido con cosas que la gente deja o condimentos. Está bien tomar algo de allí si alguien te lo ofrece, pero, a menos que te lo den, no comas ni tomes lo que no es tuyo.
14. No lleves comida al dormitorio
Hay alimentos que pueden ser deliciosos, pero apestan y atraen bichos. Los hostels tienen zonas de comedor y salas comunes por una razón. Úsalas para comer.
No es difícil seguir estas reglas. No tienes que dejar de ser tú, pero recuerda lo que tu maestra de kinder te enseñó: jugar bien con los demás. Respeta el espacio de los otros como quieres que respeten el tuyo. No eres el único en el hostel. Estás rodeado de personas con diferentes necesidades. Sé consciente de eso.
Lo único que recuerdo de las personas que me despertaron o dejaron el lugar sucio es que fueron groseras y no eran con quienes quería pasar el tiempo. Si las volviera a ver, me alejaría. No dejes que esa persona seas tú.
Deja que la gente se quede con buenos recuerdos de ti siendo un viajero increíble y respetuoso.
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