Qué ver en Alemania: descubre 15 destinos imprescindibles en 2026

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Te llevamos en un recorrido por 15 de los mejores lugares que ver en Alemania, para que puedas organizar tu itinerario según tus intereses.

Con sus ciudades vibrantes llenas de arte y arquitectura impresionante, paisajes naturales asombrosos y una gastronomía auténtica, un viaje por Alemania está lleno de experiencias únicas e inolvidables.

Cada ciudad alemana tiene su propio carácter único que refleja tanto el pasado histórico como el presente dinámico del país.

Desde explorar castillos medievales hasta pasear por bosques encantadores; desde sumergirse en la bulliciosa vida nocturna hasta disfrutar tranquilamente del famoso café Kaffee und Kuchen (café y pastel) al atardecer.

Estos son nuestros destinos preferidos para ver en Alemania

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Qué ver en Alemania: 15 lugares recomendados

1. Berlín: La capital de la historia y la cultura

La capital alemana, es una ciudad que rebosa historia en cada rincón. Desde los restos del Muro de Berlín, hasta el majestuoso edificio del Reichstag (actual sede del Parlamento), se respira un aire que combina pasado y presente.

Pero Berlín no solo es historia. Esta metrópoli vibrante también destaca por su cultura moderna y vida nocturna única en el mundo. Es famosa por sus clubes underground, donde puedes bailar al ritmo de techno hasta el amanecer.

Durante el día, hay mucho más para explorar. El distrito artístico de Kreuzberg está lleno de galerías innovadoras como el Urban Nation Museum for Urban Contemporary Art. Aquí puedes ver las últimas tendencias en arte urbano o simplemente pasear entre murales coloridos.

También te recomendamos visitar algunos de los parques urbanos en Berlín para un descanso tranquilo después de tanta actividad cultural. Por ejemplo, Tiergarten ofrece amplios espacios verdes.

No olvides probar algunas especialidades culinarias locales durante tu estancia. Los berlineses adoran su currywurst (salchicha con curry), disponible en prácticamente cualquier puesto callejero. O si prefieres algo más sofisticado, la ciudad cuenta con varios restaurantes galardonados con estrellas Michelin.

2. Múnich: cerveza, arte y tradición

Si piensas en Múnich, probablemente te venga a la cabeza una imagen de cerveza espumosa servida en enormes jarras. Y no estarías equivocado. El Oktoberfest, que es el festival cervecero más grande del mundo, se celebra aquí cada año.

Pero Múnich es mucho más que solo cerveza. La ciudad también está llena de impresionantes edificios históricos y museos repletos de obras maestras del arte mundial.

Al pasear por sus calles adoquinadas, verás arquitectura tradicional bávara junto con estructuras modernistas sorprendentes como el estadio Allianz Arena o el Museo BMW. El centro neurálgico es Marienplatz con su famoso carillón, y cerca podrás descubrir la joya gótica Frauenkirche.

El arte tiene un lugar especial en Múnich: alberga algunos de los mejores museos de Alemania como el Alte Pinakothek, el Neue Pinakothek y la Pinakothek der Moderne, donde encontrarás desde antiguas pinturas renacentistas hasta instalaciones contemporáneas.

Si te gusta la cerveza, no puedes irte de Múnich sin visitar Hofbräuhaus am Platzl, uno de los salones cerveceros más antiguos e icónicos del mundo para vivir auténticas experiencias bávaras.

Múnich también ofrece una amplia variedad de parques y jardines para relajarte. El Englischer Garten es uno de los parques urbanos más grandes del mundo, incluso más grande que Central Park en Nueva York.

3. Colonia: un paseo por el Rin

La ciudad de Colonia, con su famosa catedral gótica y su ubicación a orillas del Rin, te cautivará desde el primer momento. No solo es una joya arquitectónica, sino también un destino vibrante lleno de cultura e historia.

Aunque hay muchos lugares que puedes visitar en Colonia, la Catedral de Colonia (Kölner Dom) sin duda se lleva todos los aplausos. Esta obra maestra gótica tardó más de 600 años en completarse y hoy en día sigue siendo uno de los edificios religiosos más impresionantes del mundo. Sube los 533 escalones hasta lo alto para obtener vistas panorámicas inigualables.

Pero eso no es todo; déjate llevar por las aguas tranquilas del río Rin durante un paseo fluvial. El crucero turístico «KD Rhine Pass» ofrece tours diarios donde podrás disfrutar del paisaje urbano mientras descubres detalles interesantes sobre la historia local.

Otro punto destacado son sus museos únicos como el Museo Ludwig, hogar de arte moderno y contemporáneo, incluyendo obras significativas como la colección Picasso. Además, está el divertido Museo del Chocolate.

Sin embargo, no puedes irte sin recorrer las calles adoquinadas del casco antiguo de Colonia, lleno de encanto y carácter. Aquí encontrarás muchas cervecerías que sirven la famosa Kölsch, una cerveza rubia ligera típica de esta ciudad.

4. Selva Negra: el corazón natural de Alemania

Esta región montañosa ubicada al suroeste del país te sorprenderá con sus paisajes espectaculares, pueblos pintorescos y una cultura rica.

La Selva Negra se extiende desde el sur del río Neckar hasta la frontera con Suiza. Aquí encontrarás densos bosques de abetos que dan nombre a esta región, valles profundos, lagos cristalinos y altas cumbres como el Feldberg con 1.493 metros de altura.

Pero no solo naturaleza ofrece este destino; también puedes disfrutar de pintorescos pueblos como Schiltach y Donaueschingen, lugar de nacimiento del río Danubio. Además, ciudades fascinantes como Friburgo o Baden-Baden, donde podrás relajarte en sus famosos baños termales y hacer la ruta alta de la Selva Negra, que te lleva en un circuito de senderismo hasta Freudenstadt.

No puedes dejar pasar la oportunidad de recorrer el Black Forest Railway o ‘Schwarzwaldbahn’, uno de los trayectos ferroviarios más bellos e impresionantes de Europa. Este viaje panorámico te llevará por túneles oscuros, viaductos vertiginosos y vistas inigualables a través del corazón mismo de la Selva Negra.

Y claro, no te olvides de probar la emblemática torta Selva Negra (Schwarzwaldtorte) y sus famosos vinos blancos suaves.

5. Dresde: La joya del Elba

Dresde destaca por su impresionante arquitectura barroca y su vibrante escena cultural.

El encanto de sus calles empedradas y los tesoros ocultos en cada rincón hacen que Dresde sea uno de los mejores lugares que ver en Alemania.

El Residenzschloss, antiguo palacio real, es una parada obligatoria para cualquier amante de la historia. Este imponente edificio alberga varias exposiciones fascinantes que permiten echar un vistazo al pasado.

También deberías hacer tiempo para pasear por las orillas del río Elba. Desde allí puedes disfrutar de vistas panorámicas inigualables de la silueta histórica de Dresde, dominada por iglesias barrocas y antiguas fortalezas.

No te pierdas el Semperoper. Esta joya arquitectónica no solo es uno de los teatros más bellos del mundo, sino también uno con una larga tradición operística.

Haz un viaje en el tiempo explorando Zwinger, una obra maestra del arte barroco donde podrás admirar porcelanas exquisitas y relojes antiguos.

Y paseando por Dresde, te cruzarás con Frauenkirche, una iglesia cuya increíble reconstrucción simboliza la reconciliación y esperanza tras los horrores de la guerra.

6. Hamburgo: la «Puerta de entrada al mundo»

Conocida por su puerto, uno de los más grandes del mundo y que le dio su apodo en Europa como “la puerta de entrada al mundo”, Hamburgo es una ciudad que te sorprenderá. Desde sus canales y puentes hasta su animada vida nocturna, esta metrópoli alemana tiene mucho que ofrecer.

El primer lugar a visitar en Hamburgo es sin duda la Speicherstadt, el distrito de almacenes más grande del mundo. Este impresionante conjunto arquitectónico ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y es un deleite para los amantes de la fotografía.

Pero no todo son edificios antiguos en Hamburgo; también puedes explorar barrios modernos como HafenCity. Allí encontrarás el espectacular Elbphilharmonie, un hito cultural cuya silueta se reconoce desde lejos.

No debes olvidarte tampoco del parque Planten un Bomen con su hermoso jardín japonés o dar un paseo junto al lago Alster. Si eres fanático del arte contemporáneo, visita el Kunsthalle Hamburg donde podrás admirar obras maestras europeas desde el Renacimiento hasta la actualidad.

7. Frankfurt: mucho más que su mercado navideño

Desde rascacielos modernos hasta barrios históricos, pasando por museos fascinantes y espacios verdes, Frankfurt tiene muchos lugares para conocer, siendo sin duda uno de los mejores destinos que ver en Alemania.

La ciudad es más famosa en Europa por su mercado navideño, pero durante todo el año hay razones para visitarla.

Uno de sus lugares más emblemáticos es la Main Tower, una torre rascacielos con una plataforma de observación desde donde podrás disfrutar de vistas panorámicas inigualables de la ciudad.

Otro lugar interesante para explorar es el distrito Sachsenhausen, conocido por sus acogedoras sidrerías y restaurantes tradicionales alemanes. No te pierdas la oportunidad de probar la «Apfelwein», o vino de manzana, muy popular entre los locales.

Los amantes del arte deben hacer una parada en el Museumsufer, un conjunto único de museos a lo largo del río Meno. Aquí encontrarás instituciones tan prestigiosas como el Städel Museum, una de las principales galerías de Alemania.

También es imprescindible pasear por las calles empedradas del Römerberg, la plaza principal antigua, donde se encuentran edificios históricos como el Ayuntamiento Romer y varias casas patricias reconstruidas tras la Segunda Guerra Mundial.

8. Rothenburg ob der Tauber: un viaje a un pueblo de cuento

Si eres amante de la historia y la arquitectura, no puedes perderte Rothenburg ob der Tauber en tu viaje a Alemania. Esta pintoresca ciudad medieval te transportará en el tiempo con sus calles empedradas, murallas bien conservadas y casas con entramados de madera.

Situada en la romántica Ruta del Románico, Rothenburg es famosa por su arquitectura medieval, que se ha mantenido prácticamente intacta durante siglos. Puedes comenzar tu visita recorriendo las antiguas murallas de la ciudad para obtener una vista panorámica inigualable. No olvides visitar también el Ayuntamiento (Rathaus), uno de los edificios más emblemáticos de Rothenburg.

Paseando por sus calles sentirás como si estuvieras dentro de un cuento de hadas gracias al encanto único que posee este lugar. Además, podrás degustar platos tradicionales alemanes en sus acogedores restaurantes y tabernas.

9. Nuremberg: conociendo el pasado y el presente alemán

Conocida por su historia medieval y su arquitectura bien conservada, Nuremberg es sin duda uno de los destinos más encantadores que ver en Alemania. Su casco antiguo está lleno de calles adoquinadas y casas con entramados de madera que te transportan a otra época.

Un lugar imperdible en Nuremberg es el Castillo Imperial, un símbolo importante del poderío imperial alemán durante la Edad Media. Desde lo alto del castillo, se puede disfrutar de una vista panorámica impresionante de toda la ciudad.

Otro sitio interesante para visitar es el Centro Documental del Partido

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