¿Qué está ocurriendo en Francia con los impuestos y la residencia?
Recientemente, el comité de finanzas en Francia ha propuesto que todos los ciudadanos franceses paguen impuestos en Francia, sin importar en qué país residan. Actualmente, en Europa, la mayoría de los países basan su sistema de tributación en la residencia, es decir, tributas en el lugar donde vives, sin importar tu nacionalidad.
Pero esta nueva propuesta busca crear un impuesto universal donde todos los franceses, solo por serlo, estén obligados a tributar en su país de origen, aunque vivan y trabajen en el extranjero.
¿Es común este sistema de tributación?
Este sistema de tributación no es muy habitual, pero tampoco es algo nuevo. De hecho, sólo dos países en el mundo lo aplican actualmente: Estados Unidos y Eritrea. Y si no sabes dónde está Eritrea, no te preocupes, no eres el único.
Este sistema es la razón por la cual existen leyes como FATCA, que dificultan que estadounidenses abran cuentas en el extranjero. Muchos bancos prefieren no complicarse con papeleo y, en consecuencia, rechazan cuentas, salvo las de gran tamaño.
Controversia y debate sobre el impuesto universal
Este modelo de tributación por ciudadanía o impuesto universal genera mucha controversia y se considera bastante injusto. Y aunque la propuesta aún está en fases iniciales, ya ha sido aprobada por el comité de finanzas y pasará a la asamblea nacional para debate y votación. Si se aprueba, seguirá su camino en el Senado y, finalmente, podría convertirse en ley por parte del presidente francés.
¿Por qué Francia quiere que sus ciudadanos paguen impuestos en el extranjero?
Desde principios del siglo XXI, muchos franceses han cruzado las fronteras para residir, principalmente en países cercanos como Bélgica. ¿La razón? La alta carga fiscal en Francia. Bélgica, aunque no es un paraíso fiscal, ofrece una carga fiscal menor, hablan el mismo idioma y están a pocas horas en coche de las ciudades francesas.
Este éxodo de franceses es cada vez más notable. Un caso famoso fue el del actor francés Gérard Depardieu, quien tras rumores de una supertasa del 75% para ingresos superiores a un millón de euros, decidió mudarse a una localidad belga fronteriza. Esto generó mucha controversia en Francia y los medios no dejaron de hablar del tema. Depardieu incluso renunció a la ciudadanía francesa y adquirió la rusa, además de la de Emiratos Árabes Unidos recientemente.
Este fue solo uno de muchos casos. En realidad, miles de franceses han hecho lo mismo, buscando una fiscalidad más llevadera en el extranjero.
¿Dónde se encuentran franceses en el mundo?
Hoy en día, hay franceses en todo el mundo: Panamá, Paraguay, Mauricio, Emiratos, Hong Kong, Tailandia y muchos países con menor presión fiscal.
Medidas para frenar la fuga de contribuyentes
Francia ha implementado varias medidas en los últimos años para evitar la salida de contribuyentes. La primera fue el EXIT TAX, que obliga a pagar impuestos sobre ganancias potenciales de ciertos activos si decides cambiar tu residencia, considerando las ganancias hipotéticas si los hubieras vendido en ese momento.
En 2021, firmaron una revisión del acuerdo de doble imposición con Bélgica, estableciendo que en ciertos casos, los franceses en Bélgica podrían ser gravados también en Francia. Por ejemplo, si un francés en Bélgica vende acciones de una empresa francesa, podría tener que pagar impuestos en ambos países.
Tendencias en las políticas fiscales francesas
Todo indica que las políticas fiscales en Francia son cada vez más restrictivas, buscando evitar el éxodo de contribuyentes, o, como lo ven ellos, “esclavos que quieren escapar de la plantación”.
¿Y qué pasa si no eres francés?
Quizá te preguntes: «¿Y a mí qué me importa esto si no soy francés?». La respuesta es que, si esta medida se aprueba, podría sentar un precedente en la Unión Europea y abrir la puerta a que otros países intenten algo similar, incluido España, que ya tiene algunas políticas similares.
Ejemplos de otros países y su impacto
En Estados Unidos, existe una guerra fiscal entre estados. Algunos, como Delaware, tienen impuestos mucho más bajos que otros, como California. Muchas empresas optan por establecerse en estados con menor carga fiscal. Con el crecimiento del comercio online, los estados empezaron a exigir impuestos incluso sin presencia física, siempre que las ventas sean significativas.
En Brasil, un sistema federal con políticas fiscales diferentes en cada estado generó una guerra fiscal, con estados que atraían empresas con impuestos bajos. Luego, crearon un impuesto adicional para repartir los ingresos, lo que convirtió a Brasil en un país con una carga fiscal muy compleja.
¿Qué nos enseñan estos ejemplos?
El patrón es siempre el mismo: cuando un territorio ve afectados sus intereses, en lugar de analizar qué se puede mejorar, opta por aplicar medidas restrictivas y nuevas políticas fiscales. Esto se repite en muchos países, y en Europa se puede prever que otros seguirán el ejemplo de Francia si ven que funciona.
¿Y qué pasa en España?
En España, ya existe algo parecido: si un ciudadano traslada su residencia fiscal a un paraíso fiscal, sigue siendo contribuyente del IRPF durante cuatro años. Además, en el caso de quienes cobran prestaciones por desempleo, no pueden abandonar la Unión Europea para seguir cobrando.
¿Qué pasará si estas políticas se extienden?
Es probable que muchos opten por renunciar a su pasaporte y buscar otros países donde obtener ciudadanía y pasaporte, mediante inversión, residencia o matrimonio. Países ofrecen ciudadanía por inversión, con precios que comienzan en unos 150,000 euros, permitiendo viajar sin visado a muchos destinos.
Si quieres conocer más opciones de países que venden pasaportes, revisa la descripción del vídeo. Estas cantidades muestran que la medida francesa no solo busca gravar a los ultrarricos, ya que estos pueden comprar un pasaporte en otro país y seguir adelante.
¿Y qué pasa con la clase media?
La verdadera afectada es la clase media, que no puede permitirse estos lujos y solo busca salir adelante y dejar un futuro mejor para su familia.
¿Y qué pasa en el mundo online?
Muchos emprendedores y vendedores en plataformas como Amazon, Shopify, infoproductores, YouTubers, diseñadores y consultores, entre otros, están considerando marcharse. Cuando facturan entre 100,000 y 200,000 euros o dólares al año, y ganan entre 25,000 y 50,000, saben que las oportunidades se están cerrando y prefieren migrar antes de que sea demasiado tarde.
¿Por qué se van?
Porque los gobiernos apuntan a la clase media, no a los ultrarricos, y quieren evitar que se marchen, porque si no, el sistema colapsaría. La tendencia es clara: si las políticas fiscales siguen así, el éxodo continuará.
¿Qué podemos hacer?
Lo recomendable es estar informado, tener un plan B y actuar antes de que se cierre la ventana de oportunidad. La implementación de un impuesto universal podría provocar renuncias masivas de pasaportes europeos, ya que la vía más sencilla para escapar sería renunciar a la ciudadanía y buscar otro país.
¿Y qué pasa con la política y las leyes?
La política puede cambiar, y muchas decisiones dependen de interpretaciones y de intereses políticos. Sin embargo, la tendencia indica que los gobiernos seguirán endureciendo sus políticas fiscales para mantener sus ingresos.
¿Y cuál sería la solución?
Muchos optarán por renunciar a su pasaporte y buscar otros países con mejores condiciones. Países ofrecen ciudadanía por inversión, con precios que oscilan desde 150,000 euros en adelante, permitiendo viajar sin visado a muchos destinos.
¿Qué pasa si quieres crear una LLC en Estados Unidos?
Si estás pensando en crear una LLC para tus negocios online, hay cursos y formaciones que te pueden ayudar. La inversión en estos cursos puede ser una buena estrategia para proteger tu patrimonio y seguir operando con libertad.
En conclusión, la fiscalidad y los cambios en las políticas fiscales están impulsando un éxodo de emprendedores y profesionales. Es importante estar preparado, tener un plan alternativo y actuar con anticipación para evitar quedar atrapado en un sistema cada vez más restrictivo.