Puede parecer innecesario tener un contador, pero a medida que avanzas en edad y tus finanzas se vuelven más complejas, su ayuda suele ser fundamental. Una relación con un contador confiable puede durar años y ser muy beneficiosa.
Establecer una colaboración con una firma global de contabilidad y asesoría fiscal integral puede apoyarte tanto en tu vida personal como profesional. A continuación, te contamos algunos errores que un contador experto puede ayudarte a evitar.
Mantener un ojo en tus deducciones
Cada año, necesitas determinar qué puedes deducir en tus impuestos. Existen muchas lagunas y áreas grises que podrías aprovechar, pero probablemente no conoces todos los detalles del código fiscal.
Tu contador puede evitar que intentes deducir algo que no es legal hacerlo. Quizá desconocías alguna regla que estás infringiendo, pero un buen contador puede detectarlo fácilmente.
Ayudarte a planificar
Si tienes un negocio, un contador puede asistirte en la planificación futura. Igual que necesitas un planificador financiero en tu vida personal, tu contador puede ayudarte a gestionar tus finanzas en tu negocio.
Puede apoyarte en áreas como la planificación de fusiones o la adquisición de otra empresa. No querrás manejar estos asuntos sin asesoramiento experto.
Identificar deducciones que pudiste haber pasado por alto
También puedes contar con tu contador para detectar deducciones que quizás no hayas considerado. Esto puede ahorrarte cientos o incluso miles de dólares, por lo que esta relación puede ser realmente valiosa.
Mantenerse actualizado sobre las leyes fiscales
Ya sea en tu vida personal o profesional, es importante estar al día con las leyes fiscales. Estas cambian constantemente y, seguramente, tú no las sigues de cerca. Un contador competente sí lo hará y te informará sobre cualquier cambio cada año para que puedas ajustarte.
Gestionar tu nómina
Si tienes un negocio, dependerás de varias personas y departamentos para que tu nómina funcione sin problemas. Esto es vital para mantener felices a tus empleados, así como a tus socios y stakeholders.
Si tus finanzas en el negocio se vuelven inestables, esto puede escalar rápidamente a una crisis. Un contador puede ser la protección que impida que eso suceda.
Monitorizar tu flujo de efectivo
El flujo de efectivo es un indicador confiable de la salud de tu negocio. Si algo falla en él, es una señal temprana de que podrías estar en riesgo de fracasar. Tu contador debe detectar rápidamente cualquier problema importante y alertarte.
Controlar el presupuesto de tu empresa
Tu contador puede ayudarte a revisar si el presupuesto de tu negocio es realista. Si tiene sugerencias, escúchalas con atención, ya que probablemente tengan sentido desde una perspectiva estratégica.