¿Alguna vez te has preguntado para qué sirve tener una cuenta bancaria offshore?
Aunque ya hemos hablado de la posibilidad de usar este tipo de cuentas, también como medida para proteger tus ahorros, nunca nos hemos parado a explicar las ventajas que pueden tener este tipo de cuentas.
Así las cosas, no es de extrañar que de vez en cuando recibamos preguntas sobre para qué sirve tener tu cuenta bancaria en un paraíso fiscal.
Por eso, en el artículo de hoy voy a exponer 13 razones para abrir y mantener cuentas de este tipo.
¿Qué define una cuenta bancaria offshore?
Como su nombre indica, las cuentas offshore son por un lado cuenta y por otro lado se encuentran en un paraíso fiscal.
Es decir, por un lado es un lugar (banco) en el que se deposita dinero de forma virtual o física de manera segura. Este tipo de cuentas no se diferencia mucho de las que conocemos y están a pie de calle en nuestros países.
Tienes acceso total a tu dinero a través de banca online y puedes retirar dinero o pagar en establecimientos mediante tu tarjeta.
Eso sí, las comisiones y tasas son más elevadas, ya que la banca offshore suele financiarse por esta vía, en lugar de a través de los préstamos que otorgan con el dinero depositado (como suele ocurrir en la banca que conocemos). Justamente esta característica hace que los bancos offshore sean una alternativa más segura.
Por otro lado son cuentas que se encuentran offshore, es decir, “más allá de la costa”, generalmente en islas.
Hoy en día, offshore ya no solo se refiere a países insulares, sino también a lugares como Belice, Panamá, Liechtenstein o Andorra, que se consideran offshore. Más bien, se refiere a países o zonas fuera del control directo, con poca industria y recursos, que se especializan en ofrecer este tipo de servicios.
Offshore suele usarse como sinónimo de paraíso fiscal.
A continuación, hablaremos de las ventajas que ofrece la banca offshore frente a la banca convencional.
Algunos puntos que mencionamos aquí quizás no parezcan tan relevantes hoy en día, pero ten en cuenta que esto puede cambiar en un futuro cercano, especialmente en momentos de crisis financiera o catástrofes (medioambientales, bélicas o de otro tipo).
Incluso si no se produjeran limitaciones o controles en la circulación de efectivo (que en España y muchos países ya existen), si no se sufrieran expropiaciones (que ya hemos vivido, también en Europa) y si no afectara la inflación a nuestros ahorros (de la que pocos países se escapan), distribuir los huevos en varias cestas siempre ha sido una buena estrategia para aumentar la seguridad económica.
13 razones para abrir una cuenta offshore
No todos los bancos offshore son iguales, así que las razones aquí listadas tampoco se aplican en todos los casos.
Las razones para abrir una cuenta offshore se pueden clasificar en dos categorías: como seguro frente a ciertos riesgos o para aprovechar nuevas oportunidades. Además, se puede añadir un componente moral a estas razones.
1. Te permite evitar controles de capital
Imagina que vives en Grecia y no tienes tu dinero en un banco fuera del país. Te habrán limitado la cantidad de dinero que puedes retirar del cajero a 60€ al día y no podrás hacer transferencias internacionales. Por lo tanto, no podrás comprar en Amazon, PayPal, Western Union y otros servicios han dejado de operar en el país debido a los controles y restricciones.
Si no es con Bitcoin, otras criptomonedas o en efectivo, no tendrás forma de sacar dinero del país. Si te descubren llevando una suma demasiado alta en efectivo, te confiscarán el dinero directamente.
Los controles de capital no son una tontería, no solo afectan a particulares, sino también a empresas.
Las empresas no pueden importar ni exportar con normalidad. Dado que servicios financieros como PayPal han dejado de funcionar, muchos clientes no pueden pagar sus productos.
Los controles de capital también se aplican en momentos de crisis. Los Estados los usan para evitar la salida de dinero al extranjero, pero sus efectos secundarios pueden ser devastadores, dejando al país aislado del mercado internacional.
Los efectos se notan para todos, pero mucho más para quienes no han puesto a salvo al menos una parte de su dinero. Así, los griegos con fondos en cuentas en el extranjero pudieron retirar más dinero y salir del país sin problemas.
Por eso, una de las razones para tener una cuenta offshore es poder evitar controles de capital.
Estos controles generalmente no afectan todos los movimientos de dinero, sino solo el flujo hacia el exterior.
El gobierno griego no cerraría el turismo, pero si bloquea el flujo de dinero desde el exterior, los turistas no podrán gastar en el país, y los residentes también se verán afectados.
Con una cuenta en el extranjero, siempre que elijas bien la jurisdicción offshore, estarás protegido ante futuros controles de capital.
Así, aunque en tu país impongan restricciones, podrás seguir accediendo a tu dinero y, si la situación lo requiere, escapar del país.
Si tienes todos tus fondos en un solo país y este impone controles, podrías quedarte atrapado y perderlo todo. Las cuentas en el extranjero han salvado vidas en momentos críticos.
2. Te protege ante limitaciones o prohibiciones a la circulación de efectivo
Ya hemos hablado antes de las restricciones en la circulación de efectivo, políticas que cada vez cuentan con más respaldo de economistas y políticos.
Generalmente, justifican estas medidas para prevenir el lavado de dinero, pero en realidad hay motivos más profundos.
El objetivo principal es limitar las opciones de escape de los ciudadanos, reduciendo su capacidad para defenderse ante expropiaciones indirectas, tasas negativas o inflación.
La mayoría no se da cuenta, pero su dinero va perdiendo valor poco a poco, sin que ocurra un evento dramático como una expropiación directa.
Incluso si alguien advierte y protesta, el gobierno puede culpar a causas externas como el capitalismo.
En realidad, la responsabilidad recae en los bancos centrales, que fijan tasas de interés y controlan la inflación (en la UE, el Banco Central Europeo).
Tener una cuenta en un paraíso fiscal no te protege directamente de la prohibición de circulación de efectivo. Pero si se prohíbe pagar en efectivo, esa medida afectará a todos por igual.
Sin embargo, si esa prohibición va acompañada de controles de capital, tu dinero ya estará fuera del país, y solo tendrás que salir para acceder a él y comenzar una nueva vida en otro lugar.
3. Te protege de la expropiación indirecta mediante inflación
Ya hemos mencionado cómo las cuentas offshore ofrecen protección frente a la inflación.
Mientras los bancos centrales manipulen la economía, la inflación persistirá.
La deflación a menudo se ve como un problema, pero mantener una pequeña inflación también puede considerarse positivo. Sin embargo, toda inflación, por pequeña que sea, erosiona los ahorros.
La inflación se mantiene en niveles soportables en Europa, pero ¿hasta cuándo?
En países como Venezuela, la inflación ha llegado a niveles del 550% en 2016 y se prevé que alcance el 2200% en 2026. Los activos de sus habitantes pierden valor rápidamente.
Las cuentas en paraísos fiscales también pueden protegernos frente a la inflación.
Al cambiar tu dinero a otra divisa, puedes escapar de sus efectos. Aunque los paraísos fiscales no están exentos de inflación, si eliges bien la jurisdicción y el banco offshore, podrás usar monedas más seguras e incluso tener tu dinero en varias divisas, algo que muchas cuentas offshore permiten.
Además, en las cuentas offshore puedes seleccionar en qué moneda mantener tu dinero, lo que te da flexibilidad ante cambios económicos.
Generalmente, no todas las divisas pierden valor al mismo tiempo, y siempre hay alguna que gana valor, permitiéndote incluso obtener beneficios comprando y vendiendo diferentes monedas.
4. Te protege de la expropiación directa por acciones del gobierno
Hemos hablado de expropiaciones indirectas, pero también puede ocurrir una expropiación por decreto gubernamental.
Por ejemplo, en 2013 en Chipre, los clientes del Laiki Bank perdieron todo lo que excedía los 100.000€, y en el Bank of Cyprus se congeló el 50% de sus fondos, entregándoles acciones a cambio.
Luego, Chipre compensó a muchos afectados, pero la situación fue un claro ejemplo de expropiación forzada.
Esta no será la última vez que ocurra. Aunque Grecia parece estar evitando estas medidas, en otros países de Europa la situación puede empeorar, especialmente con el alto endeudamiento de muchas naciones.
5. Te permite eludir impuestos de forma legal
Las cuentas offshore también facilitan eludir impuestos de manera legal. A menudo se habla de personas que evaden impuestos en países como Suiza, Andorra o similares.
Esto puede dar la impresión de que tener una cuenta offshore es ilegal, pero en la mayoría de los casos no lo es.
Hoy en día, evadir impuestos no es recomendable, especialmente con el intercambio automático de datos fiscales entre países. La mejor opción es reducir legalmente la carga tributaria con asesoría especializada.
Con la ayuda de un buen asesor fiscal, casi todos pueden pagar menos impuestos, y una cuenta offshore suele ser una pieza clave en esa estrategia.
7. Puedes usarlo como fondo de previsión en caso de catástrofes
Otra razón válida para mantener una cuenta offshore es prepararse para catástrofes naturales.
Huracanes, terremotos, tsunamis o tornados pueden colapsar la banca local.
En casos como el huracán Katrina en Nueva Orleans, tener el dinero en casa o escondido no sirvió de mucho ante la destrucción y el saqueo.
8. Se trata de bancos más seguros
Al elegir una cuenta bancaria, no solo debes considerar riesgos externos, sino también la estabilidad interna del banco.
Las cuentas offshore suelen estar en bancos más estables y seguros.
La banca convencional se financia mediante préstamos, poniendo en riesgo tu dinero al prestarlo a otros. En cambio, los bancos offshore se financian con tasas y comisiones, sin tocar los fondos depositados.
Su nivel de capital propio suele ser cercano al 100%, permitiendo retirar todo el dinero si todos los clientes quisieran hacerlo simultáneamente.
En bancos tradicionales, el capital propio suele ser menor al 10% (reserva fraccionaria).
Los gobiernos occidentales ofrecen garantías, pero estas promesas pueden ser inútiles en una crisis bancaria grave.
9. Ofrecen productos financieros más innovadores
Aunque los bancos offshore están regulados, en menor medida que los bancos tradicionales, lo que les permite ofrecer productos financieros innovadores y poco comunes en otros lugares.
No recomiendo contratar productos que no entiendas, pero para quienes estudian estos instrumentos, representan una oportunidad para maximizar sus recursos.
10. El servicio y la asistencia al cliente de los banqueros privados es mucho mejor
Otra ventaja de abrir una cuenta en un banco offshore es la atención personalizada y de mayor calidad. Los banqueros suelen estar mejor formados y menos limitados por normas internas o intereses económicos.
En bancos tradicionales, los asesores a menudo reciben comisiones por productos que venden, lo que puede sesgar su consejo. En cambio, en banca offshore, los asesores suelen tener un sueldo fijo y su prioridad es la satisfacción del cliente.
Además, están disponibles por teléfono, email, Skype o incluso en persona, sin necesidad de cita previa, a diferencia de los bancos tradicionales.
11. Puedes conseguir tasas de interés mucho más altas
Hoy en día, los intereses negativos o bajos en Europa dificultan obtener rentabilidad. Sin embargo, en otros países, las tasas pueden ser mucho más atractivas.
Por ejemplo, en bancos en Turquía, puedes encontrar intereses del 10%, y en países como Uganda, Bangladesh o Mongolia, tasas del 12% o más.
En países como Ucrania, incluso tasas del 20% en depósitos a corto plazo son posibles.
Incluso si prefieres menor riesgo, puedes encontrar intereses del 4 al 8%, lo que te permite hacer crecer tu capital de forma segura.
Los bancos que no prestan tu dinero o que garantizan los depósitos suelen ofrecer estos intereses, mientras que los que cobran por el servicio no ofrecen rentabilidad.
Nunca aceptes intereses negativos, algo que en banca offshore no suele ocurrir.